Las obras - bioconstrucción

Las obras empezaron en diciembre del 2017 cuando Abdou y Marina –prima y arquitecta- viajaron a Senegal para conocer el terreno y mejorar los planos in situ. Con los planos más o menos claros y con la ayuda del arquitecto Sarr y el equipo constructor se hicieron los fundamentos. A partir de aquí ya entraron en juego los equipos de Betecer@s: 2 equipos, uno de mujeres y el otro de hombres, que fueron prensando uno a uno todos los tochos necesarios. Los tochos están hechos de tierra, agua y cal, prensados y secados al sol. La tierra y los bidones de agua llegan al terreno en carro de caballo. 

Los encargados de levantar las paredes y muros han sido Pape Latir y su equipo bajo la supervisión de María, arquitecta y vecina. Pape Latir también es nuestro vecino, y además es un constructor con muchísima experiencia y nos ha hecho aportaciones de mejora muy interesantes que hemos recogido y aplicado. 

Con los muros alzados han podido empezar a trabajar Michel y su equipo de techos.

Michel también es un vecino de la isla y es el mejor construyendo cubiertas. Hemos descubierto que es una persona muy perfeccionista... y por esto fue una buena yincana conseguir las maderas necesarias para su trabajo. Finalmente, y después de dar muchas vueltas, Michel y sus ayudantes consiguieron encontrar las mejores maderas del país en Dakar. Éstas salieron del barrio de los carpinteros de la capital en caballo, se transportaron hasta Ndangane con un camión inmenso, y cruzaron hasta la Isla de Mar Lodj en pirogue. ¡¡Vaya xou!! 

Michel y Pape Latir nos aconsejaron que sobre las maderas del techo colocáramos krikindil, una “manta” protectora y decorativa de hoja de palma que llegó a través del rio desde Joal Fadiout. Encima del krikindil se han montado 5 capas de red de paja. ¡Está quedando precioso! 

Mbaye Ndiaye, uno de los hermanos de Abdou, es quien nos retransmite a modo de periodista los avances en la obra del Nguel du Saloum. Él es quien, desde Mar Lodj, recibe el dinero y lo distribuye de manera justa. A demás no le caen los anillos a la hora de ponerse a trabajar y procura que todos los trabajadores y trabajadoras trabajen contentos cuidando detalles como el buen ambiente en la obra e invitando a el ritual del té. 

Estamos muy content@s, muy ilusionad@s y ¡¡¡con muchas ganas de estrenar la casa!!!



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